jueves, 15 de octubre de 2009

Más australiano no se puede ser

Seguimos en el camino de integrarnos a la sociedad australiana. En el post anterior quedó demostrado que hace falta algo más que un animal con cara de bueno para frenarnos. Esta vez le toca el turno al deporte.

Como soy un desastre con patas para todo lo que implique pelotas y equipos, me decanto por actividades menos competitivas. Mi última incursión (a decir verdad nuestra última incursión, porque arrastré a Trini a exitosamente) fue, ni más ni menos que, un boomerang.



En realidad, muy pocos boomerangs de los que usaban los aborígenes australianos volvían. En general los tipos los querían para cazar, con lo cual una vez noqueada la presa hay que caminar sí o sí a buscarla, y también al contundente.

Mientras estábamos en Sydney ese fin de semana del clima asqueroso compramos uno en un mercado chino por una suma bastante módica (rata, en realidad).

El día anterior a filmar estos videos que comparto sin vergüenza estuve haciendo un poco de relevamiento de información en internet. De los muchos sitios que hablan sobre el tema se pueden extraer dos denominadores comunes. El primero es que la práctica hace al maestro, como todo en la vida. El segundo es que no cualquier palo torcido va a pegar la vuelta. Lógica rotunda.





La cosa es que el nuestro no vuelve ni aunque le prometamos ñoquis para cenar. Ya fuimos dos veces a practicar y nada. Me pregunto si es lo primero o lo segundo. ¿Por novato o por barato? Ah! no, ya lo sé. Debe ser un VERDADERO boomeran aborigen de caza, de esos que no vielven, ¿No?.

El tiempo responderá sabiamente, amiguitos.

Y como si esto fuera al poco, esta es la frutilla en la torta en lo que a hiperaustralianitis se refiere. El otro día nos compramos un coche (esa historia merece una entrada diferente en de este u otro blog). ¿Y saben qué vino de regalo para disfrutar en el verano? ¡Una tabla de surf! Cómo son estos, eh? ¡No terminamos de perfeccionar un deporte que ya nos quieren enchufar otro! Qué le vamos a hacer, de los habilidosos siempre se espera algo más.

PD: SE ACEPTAN AUSPICIANTES PARA LOS ESPACIOS EN BLANCO GIGANTES QUE ME QUEDARON EN ESTA ENTRADA.